CON CLORO SE DEFENDIÓ DE LA AGRESÓN DE SU EX PAREJA QUIEN LA AGREDIÓ CON UN CUCHILLO.

#VOZDELAGENTE Echándole cloro en los ojos, fue como una vecina de Kanasín se defendió de su ex pareja que la sometió con un cuchillo luego de golpearla y humillarla.

Narda P.H. denunció a su pareja de nombre Enrique P.Z, de presuntamente agredirla con un cuchillo después de golpearla y dañar su automóvil, según la afectada el día 21 de marzo el señor con el arma en mano la sometió y en su defensa detuvo la agresión rociándole cloro al hombre mejor conocido como el “Kibero de las Américas”

En una entrevista que brindó a Eco Yucatán la afecta relató que las agresiones eran constantes debido a que se habían separado, pero Enrique no acepta la ruptura y no la deja en paz. Narda dijo que el acoso que sufre es constante, incluso frente a su familia.

El día de los hechos Narda se encontraba con su hija de tan solo once años en su piscina de su casa en Kanasín cuando Enrique entró a su vivienda, la tomó del cabello y la agredió, en un segundo el hombre tomó un cuchillo que había dejado a fuera escondido y se lo puso en el cuello, aseguró Narda, en su defensa le roció cloro al ya que le tenía puesto el cuchillo en su garganta, al intentar salir corriendo la tiró al piso y de nuevo la golpeó, al mismo tiempo un vecino que se encontraba cerca pudo quitarle de encima al tipo quien se desquitó a banalizando su vehículo.

Al llegar a la policía, le comentaron que no podrían hacer nada, ya que no encontraron al hombre que la agredió, procedió a acudir a la Fiscalía General del Estado (FGE) en su automóvil dañado para interponer su respectiva denuncia, hasta el momento aseguró la señora Narda, no han hecho nada, y teme por su seguridad ya que no vive tranquila.

“Esperan a que me mate este tipo para que las autoridades hagan algo” mencionó, de igual manera comentó que el señor tiene una restricción, misma que no ha respetado, y todos los días rompe.

Pide Narda P. H. a las dependencias correspondientes hacer justicia y proceder como marca la ley, para ponerle un alto a Enrique P. Z, ya que teme por su vida.